Descubre Su Número De Ángel

Siempre le enviaba un mensaje de texto primero, así que dejé de hacerlo: esto es lo que sucedió

Solía ​​enviarle mensajes de texto primero, todo el tiempo. Yo iniciaría cada conversación que tuviéramos. Pero luego dejé de hacerlo. Esto es lo que sucedió.


Habíamos estado saliendo durante un mes y realmente me gustaba. Lo único que me preocupaba era que siempre era yo quien iniciaba el contacto con él. Me hizo preguntarme qué pasaría si dejara de molestarme, así que lo intenté.

No supe nada de él durante una semana.

Siempre me sentía nervioso cuando no sabía nada de él porque realmente quería hablar con él, así que seguía adelante e iniciaba el contacto. Sin mi esfuerzo, tardó una semana entera en ponerse en contacto. Me mostró lo abajo que estaba en su lista de prioridades.

Me preguntó por qué había estado tan callado.

Tuvo el descaro de preguntarme por qué no había estado en contacto. Um, ¿tal vez porque es un completo idiota que me ha estado haciendo perder el tiempo? Caray. Es curioso cómo cuando dejé de hacer un esfuerzo, fue cuando se dio cuenta de que le faltaba algo en su vida.

Le gustaba que lo persiguieran.

No me había dado cuenta en ese momento, pero había estado persiguiendo a este tipo, duro. No pasaría un máximo de dos días sin ponerme en contacto. Era ridículo y había tenido la suerte de tenerme allí sin tener que mover un dedo. En realidad, nunca movió esos mensajes de texto a algo más porque simplemente no estaba lo suficientemente interesado en mí. Tomarme un tiempo lejos de él me lo mostró alto y claro.


yo había sido la reina de textos patéticos .

Leer viejas conversaciones de texto que había compartido con este tipo me hizo temblar. Había sido la reina de '¿Qué estás haciendo?' mensajes de texto, que me hacían parecer tan desesperada y que enviaba regularmente cuando se ausentaba sin permiso. Gran parte del tiempo, yo había sido el que intentaba mantener la conversación cuando él ya se había ido. ¡No más de esa mierda!

Decidí darle lo que me dio y nada más.

Fue difícil, pero decidí hablar con él solo después de que inició el contacto. También comencé a comunicarme como él lo hizo. Por ejemplo, nunca dijo que estaba ansioso por verme cuando hizo planes para pasar el rato, así que dejé de hacerlo. Recorté todos esos emoticonos de caritas sonrientes que él evitaba y a veces le enviaba mensajes de texto de una sola palabra, como lo haría él. Enviar mensajes de texto a su manera me mostró lo poco que me había estado dando, y lo había estado aceptando.


>